‘The Walking Dead’ regresó ayer a Fox con un capítulo de gran calidad técnica y narrativa, manteniendo el pulso dramático de la que está siendo una de las mejores temporadas de la serie.
¡¡¡Mis ojos, mis ojos!!!
(Sí, esta entrada contiene SPOILERS)
La pausa de casi dos meses a la que ya deberíamos estar acostumbrados las seguidoras y seguidores de ‘The Walking Dead' sigue resultando larga, sobre todo teniendo en cuenta el abrupto final con el que se despidieron momentáneamente en Coda (5x08).
Sin embargo, los guionistas parecen haber premiado la espera con una vuelta de alto nivel y demostrando que la serie producida por Frank Darabont todavía tiene recursos para sorprender.
En What Happened and What´s Going On todavía sobrevuela el dolor y el absurdo por la muerte de Beth y se centra en Rick, Michonne, Glenn, Tyreese y Noah, que viajan hasta el pueblo natal del recién llegado al grupo. Los personajes arrastran el agotamiento y la desesperación por encontrar un lugar donde asentarse, pero por el recorrido que está haciendo la serie en la quinta temporada, no parece que vaya a aparecer el lugar perfecto en los siguientes episodios.
El hermano de Sasha se convierte en el protagonista absoluto de What Happened and What´s Going On descubriendo su lado más dramático al enfrentarse a los fantasmas de los personajes que más le han marcado: el propio Martin, El Gobernador, Bob, Beth y las hermanas Lizzy y Mika Samuels. Y recogiendo el testigo que dejó Coda, los minutos finales transcurren veloces, sorprendiendo de nuevo y dejando muy buenas vibraciones.
La quinta temporada de 'The Walking Dead' no se podría retomar mejor.
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