¡¡¡Mis ojos, mis ojos!!!
(Sí, esta entrada contiene SPOILERS)
Comrades es el título del primer episodio de la segunda temporada de ' The Americans', la serie sobre un matrimonio de espías soviéticos infiltrados en los Estados Unidos de la era Reagan.
Una reconciliación cumplidaLa segunda temporada ha vuelto con su ritmo habitual, mezclando la cara amable y familiar de estos espías (Matthw Rhys y Keri Russell) con su fiel servicio a la KGB. Pero si durante la primera temporada estas dos esferas permanecían separadas, en Comrades entienden de golpe cómo el peligro de su actividad puede salpicar y destrozar su familia a través de lo que le sucede a otra pareja de espías y las consecuencias que tiene para ellos mismos.
Su hijo no se entera de gran cosa quizás porque todavía sigue creyendo ciegamente que sus padres son los propietarios de una agencia de viajes.Al mismo tiempo su hermana Paige parece albergar más que sospechas sobre la actividad profesional de sus padres.
Fue un episodio centrado en los Jennings, aunque no faltaron sus guiños históricos (la guerra entre la URSS y Afganistán ), las críticas a la doble moral aplicada por el FBI y su despliegue de pelucas y gafas para adoptar nuevas identidades.
¿Qué podemos esperar en la segunda temporada?
Varias tramas quedaron pendientes en la primera temporada:
- La fidelidad a la KGB. Philip manifestó serias dudas durante la primera temporada y llegó a plantear la huida. Por otro lado, la rivalidad entre Elizabeth y la supervisora Claudia (Margo Martindale) ocupó buena parte de los últimos episodios.
- Su enfrentamiento contra el FBI por destapar y truncar sus misiones. Y su relación con Stan Beeman (Noah Emmerich) miembro del servicio de contraespionaje del FBI y vecino del matrimonio.
- La relación entre Stan Beeman y Nina, su supuesta informadora, miembro de la embajada rusa. El espionaje desde la alta diplomacia.
'The Americans' concentra buena parte de su narración en la relación entre el matrimonio Jennings, una pareja ficticia obligada a estar unida para infiltrarse sin levantar muchas sospechas en la que, a diferencia de otras uniones, la convivencia ha dado pie al amor. Pero el equilibrio entre profesión y vida marital es complicado porque en sus actividades como espías no sólo
roban, engañan y disparan sino que también tienen que seducir a sus objetivos
(y en el caso concreto de Philip llegar a casarse con una secretaria del FBI para
obtener información) Giros rocambolescos que la convierten en una serie bastante entretenida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Muchas gracias por tus comentarios.